El consultorio médico de La Coma, en Paterna, reabrió ayer, lunes sus puertas, con más seguridad en la entrada del edificio.
De acuerdo con la información proporcionada por Europa Press, el servicio de pediatría no estará disponible por el momento. Además, se ha implementado un riguroso dispositivo de seguridad, que incluye la presencia de la Policía de la Generalitat y otras medidas adicionales. Dos vigilantes se encargarán de mantener la seguridad en el lugar, mientras que las cámaras de videovigilancia y la instalación de botones antipánico y códigos de alerta complementarán estas acciones preventivas.
A excepción del servicio de pediatría, el personal médico se ha reincorporado en su totalidad, lo que brinda un alivio a los pacientes que necesitan atención médica en La Coma. Asimismo, dos de las cuatro enfermeras y una de las tres administrativas han vuelto a asumir sus funciones habituales.
Este episodio de violencia y amenazas ha generado una gran preocupación tanto en los profesionales de la salud como en los residentes de la comunidad. Las autoridades locales y regionales están trabajando en estrecha colaboración para garantizar la seguridad de los trabajadores y usuarios del consultorio médico, y para investigar y perseguir a los responsables de estos actos delictivos.
Las agresiones y amenazas hacia el personal médico son inaceptables y constituyen un grave obstáculo para el acceso a la atención médica de calidad. La comunidad de La Coma espera que las medidas de seguridad implementadas y las acciones legales correspondientes ayuden a prevenir futuros incidentes similares y a restablecer la confianza en el sistema de salud local.