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La vivienda tenía instalada un sistema de doble acometida de luz que hacía que la energía consumida no pasase por el contador.
La Audiencia Provincial de Alicante ha condenado a a un hombre a tres años y un día de prisión y a una multa de 32.278,54 euros por un delito contra la salud pública. Además de ser autor responsable de un delito de defraudación del fluido eléctrico, por lo que se le ha acusado a una pena de 4 meses de multa con una cuota diaria de 6 euros (720 euros).
Concretamente, los hechos se produjeron el pasado día 7 de diciembre de 2016 en una vivienda de Altea, un invernadero de marihuana, con un total de 296 macetas de plástico con sustrato vegetal, dos cajas de cartón con sustancia vegetal triturada; en otra estancia 191 macetas con sustrato vegetal así como 12 cajas de plástico contenido cada una de ella pequeños plantones de plantas de marihuana en pase primaria de crecimiento, ascendiendo a 100 plantones y 10 macetas con una planta de marihuana en estado inicial de crecimiento, que poseían para su posterior distribución al por mayor a terceros.
Asimismo las estancias contaban con instalación de lámparas halógenas de sodio de alta densidad, sistemas de ventilación, sistemas electrónicos de control de temperatura, conexión y uso manual de sistemas electrónicos de control de temperatura, conexión y uso manual de sistema de riego y maquinaria y herramientas para procesar la sustancia vegetal así como una secadora industrial.
A este respecto, agentes de la Guardia Civil practicaron el 7 de diciembre de 2016 un registro de la vivienda, donde incautaron dichas plantas y una sustancia vegetal que resultaron ser 12.199 grs de cannabis con un valor en el mercado ilícito al por mayor de 16.139,27 euros y en gramos de 61.482,96 euros.
Además, la vivienda tenía instalada un sistema de doble acometida de luz que hacía que la energía consumida no pasase por el contador.