Dice un cuento indio que tres ciegos tocaron un elefante. Después, uno lo describió como un tronco firme, porque tocó una pata; el segundo dijo que era una serpiente rugosa, porque tocó la trompa; y el tercero lo definió como una mole grande, porque tocó su panza. Por ello, según la parte del elefante que cada uno tocó, así lo interpretó.
Pues así, de esta misma manera, ocurre con nuestro pueblo, con Chiva. Chiva es el tercer municipio en extensión de la provincia de Valencia; por su longitud, 35 km desde Aldaya hasta Siete Aguas; por su dispersión demográfica, más de 16.000 habitantes distribuidos en diferentes núcleos de población en su territorio; por su topografía, desde la Sierra de los Bosques a 1.000 m de altitud, al llano de Quart casi al nivel del mar. Todo ello hace que cada uno de sus habitantes o de sus visitantes, perciban y definan a Chiva de una forma diferente y particular.
Y es bien cierto que somos un pueblo de contradicciones. Porque podemos tener una renta bruta por habitante que nos sitúa cerca del puesto veinte de toda la Comunidad Valenciana y a la vez tener a la mitad de nuestra población sin alcantarillado. Podemos tener un crecimiento medio de quinientos habitantes cada año y sin embargo no disponer de un plan urbanístico que aporte soluciones para albergar de forma adecuada las viviendas y servicios que demanda esta necesidad. Podemos tener el mayor suelo vacante para aprovechamiento industrial vinculado a la Autovía A3 a Madrid y a la A7 a Barcelona y en cambio ser el municipio con más paro de la comarca.
Y toda esta parcialidad en la forma de entender nuestro pueblo también provoca la fragmentación política. Nueve partidos optan a estas elecciones municipales. Unos se centran sólo en el casco urbano, otros en zonas concretas de urbanizaciones o en diseminados, intentando explicar la complejidad del pueblo desde su “visión”. En nuestra opinión, presentan su aspiración en influir en las decisiones futuras desde una postura subjetiva, y a veces excluyente, para otras percepciones.
No es posible gestionar, ni gobernar un municipio tan rico, tan vivo, tan diverso y complejo en cada rincón de su territorio, desde un escondite político que solo mira en una dirección. No podemos permitir que algunos vecinos confundan su pueblo, su municipio, con la hipoteca de su parcela, y desconozca, entre otras muchas cosas, que Chiva es uno de los principales pueblos de Valencia en exportación de vinos, con cuatro bodegas reconocidas a nivel nacional; que su Sierra de los Bosques contiene el mayor Paraje Municipal Protegido de la Comunidad Valenciana; que su red de senderos y rutas de bicicleta por montaña, son de las más amplias de la Comunidad; que su gastronomía tiene reconocida fama internacional; y que sus fiestas atraen, cada año, a miles de turistas.
Pero tampoco puede entenderse que otros vecinos desconozcan el paisaje de masías tradicionales valencianas, de miradores en sus lomas, de restos arqueológicos, de cultivos de regadío que existen al este de su término. Y sobre todo que desatiendan las oportunidades de convivencia y de trabajo que muchas y amplias zonas residenciales presentan para todos los ciudadanos y las empresas; que en esas zonas casi todo está por hacer y por actualizar, y que solo desde una perspectiva general, como la que propone mi candidatura, es posible dar solución a la “Chiva fragmentada” que tantos años ha dificultado su progreso. La política debe favorecer la convivencia y la percepción total de la sociedad, la cultura y la economía chivana.
Tenemos que evitar los tiempos de discusiones políticas que aplazan la solución de la seguridad en las zonas residenciales. Debemos centrarnos en conseguir que estas estén limpias, con agua de calidad y trabajar para que obtengan los servicios urbanos y dotaciones que desde siempre han necesitado sus vecinos. Y tenemos que conseguir desarrollar esta red interconectada de núcleos urbanos, de forma que el hablar de una zona u otra, se refiera, sencillamente, a aquellos barrios que conforman la totalidad de la Villa en la que habito.
Mi pueblo es Chiva, desde Santo Domingo hasta Santa María y esta candidatura va a trabajar duro por todo él.
Ernesto Navarro Yuste
Candidato a la alcaldía de Chiva por el PSPV-PSOE