Si algo está claro es que, en la actualidad, el viejo modelo de empresa cuyos equipos estaban basados en la competencia entre sus miembros y en las exigencias de un jefe autoritario ha quedado muy desactualizado. En la actualidad, las empresas más competitivas son aquellas que han abandonado la idea de promover la competitividad entre sus empleados en favor de la colaboración, el apoyo y el entendimiento.
Esto ha dado un giro de 180º a la forma de entender las empresas, que han pasado de generar un entorno hostil, frío y altamente competitivo a un modelo amable, cálido y totalmente colaborativo. ¿Pero cuáles son las claves para la construcción de equipos o para pasar de un modelo basado en la competencia a otro basado en la colaboración? Si quieres conocerlas, te recomendamos seguir leyendo, ya que contamos con la ayuda de los profesionales de www.viviendodelcuento.net.
¿Por qué es importante pasar de la competencia a la colaboración?
Cuando hablamos de competencia entre los miembros de un equipo de trabajo de una empresa o entre distintos equipos o departamentos, estamos hablando de generar rivalidad entre ellos. Antiguamente, se apostaba por este modelo más competitivo, ya que entonces era el que mejores resultados y beneficios proporcionaba a las empresas, a pesar de que el ambiente laboral era hostil, frío y muy tenso.
Sin embargo, con el paso del tiempo, el trabajo se ha ido volviendo cada vez más y más complejo y, por ello, hoy en día, las empresas requieren de varias personas con habilidades y conocimientos diferentes para conseguir unos determinados resultados y para alcanzar una serie de metas u objetivos.
Por este motivo, ha quedado claro que lo único que promueve la competitividad, en la actualidad, es la individualización laboral, lo que tiene, como consecuencia, un menor rendimiento laboral, ya que los tiempos actuales exigen colaboración. La colaboración, por su parte, se define como la capacidad de trabajar en conjunto con otras personas para alcanzar objetivos en común.
De este modo, las empresas necesitan formar equipos de trabajo multidisciplinares con personas que tienen habilidades y experiencia en diferentes campos para aprovecharlos para alcanzar metas en común de una manera más rápida y eficiente, permitiendo dar una mejor respuesta a las necesidades de los clientes, mejorar el ambiente laboral y, en consecuencia, proporcionar unos mayores beneficios a la empresa.
¿Cómo transitar de la competencia a la colaboración?
Si consideras que en tu empresa reina un ambiente demasiado competitivo entre las personas que forman tus equipos de trabajo, es posible que tengas que darles un importante giro a las políticas de tu negocio, así como a la cultura corporativa del mismo. Como hemos comentado en el apartado anterior, en la actualidad, las empresas cuyos miembros trabajan de forma individualizada no pueden crecer como es debido. Esto se debe, precisamente, a esta alta competitividad.
De esta manera, los trabajadores no quieren compartir sus conocimientos ni habilidades con los demás y las utilizan exclusivamente para destacar a nivel personal e individual, actuando de manera egoísta y sin brindar ayuda a los demás cuando la necesitan, lo cual termina siendo perjudicial para el conjunto de la empresa, ya que no es capaz de alcanzar los objetivos pactados. Si quieres evitar estas consecuencias negativas de la competencia, te aconsejamos tener en cuenta las siguientes claves:
La comunicación es muy importante a nivel corporativo
Si quieres pasar de la competencia a la colaboración en los equipos de trabajo que forman tu empresa, una de las claves es, sin lugar a dudas, la comunicación. Como líder, debes transmitir a los empleados que forman parte de cada equipo de trabajo la importancia de funcionar de una manera más colaborativa y de buscar beneficios a nivel colectivo y no a nivel individual.
Puedes hacerlo a través de una multitud de canales diferentes, como, por ejemplo, a través de reuniones periódicas, pero también mediante reuniones colectivas por videollamada, a través de llamadas telefónicas, correos electrónicos, chat o por mensajes de texto.
La idea es premiar los comportamientos colaborativos y señalar los competitivos como algo negativo a eliminar. Puede que algunos trabajadores tengan que adaptarse a cambiar su manera de proceder e incluso que haya quien no logre adaptarse y tengas que tomar decisiones difíciles para contratar otras personas que sean capaces de trabajar de manera colaborativa.
Además, fomentar la comunicación en los equipos de trabajo, a nivel interno, es fundamental para mejorar el ambiente laboral y evitar malentendidos y discusiones que pueden ser totalmente evitables y que pueden entorpecer las labores diarias y afectar negativamente a la productividad y a las ganancias de la propia organización.
Fomentar la empatía y el entendimiento es otra de las claves principales
Además de dar a la comunicación el lugar que le corresponde dentro de la empresa, también es muy importante fomentar la empatía y el entendimiento de los empleados. Así, es más fácil que sepan ponerse en el lugar de los demás y más complicado que actúen de manera individualizada y egoísta.
Gracias a ello, tus empleados podrán entender cuando uno de sus compañeros está pasando por un mal momento a nivel personal o ayudar a aligerar su carga de trabajo cuando ésta sea excesiva y necesite ayuda puntual. Fomentar la empatía también es fundamental para saber escuchar a los demás y entender o valorar posturas y maneras de proceder totalmente distintas. Gracias a ello, se pueden evitar muchos malentendidos y discusiones evitables.
Impulsar la participación es vital en cualquier empresa actual
Si quieres construir un equipo de trabajo colaborativo, este debe estar lo más unido y motivado posible y la mejor manera de lograrlo es impulsando la participación en la toma de decisiones. ¿Cuál es la mejor manera de hacerlo? Por supuesto, haciendo reuniones en las que todos los empleados puedan participar y donde puedan exponer sus ideas y dudas en cuanto a la forma de proceder.
Si detectas buenas ideas, puedes anotarlas y desarrollarlas en estas reuniones periódicas agradeciendo siempre a la persona o personas que han tenido esta idea, no sólo con palabras de agradecimiento, sino también con hechos (días de vacaciones extra, aumentos de sueldo, ascensos, dándole un suplemento extra en el sueldo, dando mayores opciones de flexibilidad laboral, etc.).
Gracias a ello, todas las personas se sentirán escuchadas y notarán que forman parte del equipo. Por ello, tenderán a implicarse de manera mucho más emocional y el ambiente de trabajo será notablemente más apropiado para colaborar. Ello se refleja en las metas y objetivos y, por supuesto, en los beneficios de la propia empresa.
¿Cómo aplicar estas claves para pasar de la competencia a la colaboración?
Si quieres que los equipos de trabajo de tu empresa pasen de la cultura de la competencia a la de la colaboración, es necesario que, como líder, trabajes la comunicación, que ayudes a fomentar la empatía y que le des un impulso a la participación de todos y cada uno de los miembros de la organización.
La mejor manera de hacerlo es a través de las actividades de team building que ofrecen expertos como los de Viviendo del Cuento, que proporcionan soluciones y creativas que generan eventos y convenciones únicas adaptadas a cualquier espacio, tiempo y presupuesto.