Ha decidido ampliar hasta el 24 de enero el cese de la actividad en el TAMA, Teatre del Mercat, Casa de la Música, MUPA, la Biblioteca Pública Municipal (sólo disponible para préstamo o devolución de libros), Matilde Salvador, Gent Jove, Encreullades y Poliesportiu Municipal.

Ante el incremento de positivos COVID-19, cada vez son más los municipios que piden a sus ciudadanos que limiten sus encuentros sociales. Este es el caso de los ayuntamiento de Aldaia y Xirivella, los cuales, además, han decidido prorrogar sus restricciones municipales.

Concretamente, Aldaia ha decidido ampliar hasta el 24 de enero el cese de la actividad en el TAMA, Teatre del Mercat, Casa de la Música, MUPA, la Biblioteca Pública Municipal (sólo disponible para préstamo o devolución de libros), Matilde Salvador, Gent Jove, Encreullades y Poliesportiu Municipal. Además, los servicios administrativos municipales seguirán prestando servicio de forma a través de Cita Previa como hasta ahora.

Xirivella viene actualizando en las últimas semanas sus criterios de vigilancia frente al COVID-19 a la par que ha incrementado en seis efectivos el cuerpo de Policía Local, tras la entrada en vigor de las últimas restricciones de la Generalitat, con toque de queda a las 22 horas y cierre de la hostelería a las 5 de la tarde.

Asimismo, la Concejalía de Seguridad Ciudadana ha reforzado la vigilancia de parques y zonas donde confluyen grupos de personas al caer la noche, así como el cumplimiento de las limitaciones de aforo en bares y restaurantes, prorrogando así sus restricciones municipales en vigor desde el pasado 4 de noviembre.

Además de esto, el decreto incluye en esta ocasión una recomendación explícita a la ciudadanía para “limitar al máximo las reuniones sociales”. El texto, firmado por el alcalde Michel Montaner, pide a la población que reduzca la vida social “a lo imprescindible evitando salir de grupos burbuja ya sea en el ámbito laboral, escolar o familiar».